El equipo permanente del área de Pastoral ha considerado que el lema de la campaña del curso 2024-2025 debía seguir en la línea del curso anterior, que giró en torno al lema: “Jesús de Nazaret, influencer del amor… ¿Le sigues?”. Con él, se pretendía descubrir la profundidad, el poder y la inmensidad del amor de Jesús e invitar a todos los miembros de la comunidad educativa a seguirle. Este seguimiento a Jesús exige, entre otras actitudes, el deseo “de recomenzar, de reiniciar y de reconvertirnos”. Estas tres palabras tienen un mismo sentido teológico, pero con el fin de dar continuidad al trabajo anterior, se ha elegido el verbo REINICIAR para el lema del curso 2024–25. Es una forma de decir: Si quieres seguir a Jesús, ¡reiníciate!

Justificación 

En el contexto de la sociedad actual, nuestros alumnos viven hiperconectados en un mundo tecnológico. La palabra reiniciar les resulta muy familiar y saben que sus móviles, ordenadores y tablets necesitan de esta función cada cierto tiempo para actualizar su sistema y recuperar sus condiciones iniciales de funcionamiento (limpiar la memoria, evitar la sobrecarga de aplicaciones…). 

Nuestro interior está sobrecargado de “aplicaciones” que nos impiden ser plenamente felices. Por tanto, reiniciarse supone hacer un trabajo de “limpieza” que implica: 

• Entrar en nuestro interior, explorar y descubrir las “aplicaciones” acumuladas durante años, así como los “virus”. El Papa Francisco dice: “Hay muchas tinieblas interiores. Y el Señor nos salva. Pero nos pide que las veamos primero; tener el valor de ver nuestras tinieblas para que la luz del Señor entre y nos salve”^[1].
• Volver a nuestra historia personal, al encuentro de todo lo bueno vivido y recibido y, también al encuentro de las heridas, del vacío, de los fracasos que la vida va dejando.

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^{[1] Homilía del 6 de mayo de 2020 en Santa Marta.}